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lunes, 26 de noviembre de 2012

El PIB Potencial

Dado que el PIB es la medida más comprensiva de la actividad económica del país, su tasa de crecimiento nos dice mucho. 

De entrada, si es una tasa negativa, es muy probable que estemos en una recesión; si es muy elevada, la economía podría estar sobrecalentada y generando presiones inflacionarias.


 
Por lo mismo, queremos ver qué tan lejos estamos de la tasa de crecimiento “ideal”, es decir, de la tasa máxima posible, que no genere presiones inflacionarias.  Ésta se conoce como el PIB potencial y es sumamente importante para las decisiones gubernamentales sobre la política fiscal y monetaria.  Si crecemos por debajo del potencial, la economía no va a generar todos los empleos posibles y el gobierno buscará impulsar una política expansiva; si crecemos por arriba del potencial, se van a generar presiones inflacionarias que disminuyen el poder adquisitivo de la población e introducen distorsiones en la asignación de recursos, por lo que el gobierno debería implementar una política restrictiva.  A final de cuenta, la política económica debería buscar acomodar el crecimiento para encontrar el balance entre producción y estabilidad de precios.

Es muy importante recalcar que aunque el PIB potencial trata de medir la capacidad productiva de la economía, no representa un máximo técnico que no se puede exceder.  Es una medida de la producción sostenible a través del tiempo mediante la cual la intensidad de uso de los recursos productivos no genera ni resta presiones inflacionarias.  Si el crecimiento de la economía excede el potencial, empiezan a crearse restricciones a la capacidad productiva, que no sólo generarán presiones inflacionarias, sino que dificultarán el propio crecimiento económico.

La diferencia entre el PIB observado y el PIB potencial se le denomina la brecha de producción (output gap).  Cuando la actividad económica crece por encima de su potencial, se genera un output gap positivo, asociado con presiones inflacionarias.  Al contrario, cuando la actividad económica cae por debajo de su nivel potencial, el output gap es negativo y se asocia con una ausencia de presiones inflacionarias, o bien, con una economía con capacidad ociosa.  Por esto, la producción potencial también se puede considerar como una estimación de la tendencia de largo plazo del PIB.

La tendencia de largo plazo del PIB real es, por lo general, al alza en la medida en que más recursos productivos (capital y trabajo) están disponibles y que mejoras tecnológicas permiten un uso más eficiente de los recursos.  Típicamente, el PIB real muestra variaciones de corto plazo alrededor de su tendencia de largo plazo debido al comportamiento cíclico de la economía (los ciclos económicos) y a choques aleatorios que son difíciles de precisar.

El concepto de PIB potencial es importante ya que nos da una referencia contra la cual quienes toman decisiones pueden evaluar el comportamiento de la economía y determinar qué acciones deberán elegir.  El entender dónde se encuentra el PIB real en relación con su potencial le permite al analista anticipar y evaluar cambios en la política económica.  Por ejemplo, es muy probable que un aumento en la inflación cuando el PIB está por debajo de su potencial se deba a factores temporales y, seguramente, no perdurará.  Por lo mismo, las autoridades monetarias no instrumentarán una política monetaria más restrictiva.

Sin embargo, el PIB potencial es un concepto teórico no observable, por lo que no se puede medir directamente.  Más bien, se puede inferir a través de información de ciertas variables macroeconómicas, pero nunca se tendrá una estimación muy robusta.  Existen varias formas de calcular el PIB potencial; una de las más simples, que se usa mucho en Estados Unidos, es tomar el insumo laboral (el número de empleados multiplicado por la cantidad de horas trabajadas por año) y la productividad (la producción por hora del insumo laboral).  También, se puede calcular de manera econométrica a través de una función de producción o estadísticamente mediante técnicas que calculan el componente permanente del PIB (su tendencia de largo plazo).

En Estados Unidos, la Oficina del Presupuesto del Congreso (US Congressional Budget Office) calcula y publica una serie del PIB potencial y es considerado como lo más cercano a una serie oficial para ese país.  En México, desafortunadamente, no existe un cálculo oficial, pues no hay un instituto que lo calcule regularmente, con disponibilidad para toda la gente.  Aunque el Banco de México lo hace de manera regular, no la da a conocer; sólo aparece en forma excepcional en algún documento o presentación, como su Informe Trimestral sobre la Inflación.  Pero dado que es lo más cercano a una serie oficial, y nuestro instituto central habla constantemente de transparencia, haría bien en publicar su cálculo en forma continua.

Varias instituciones financieras tienen su propio cálculo, pero su divulgación no es regular ni está disponible para todo el público.  Dado que existen muchas formas de cálculo, si divulgación pudiera confundir e incluso, llevar a conclusiones erróneas.  Por eso es importante que el Banco de México de a conocer su versión al público.

Independientemente de la fuente, es importante considerar que cualquier estimación del PIB potencial tendrá limitaciones.  Primero, la utilización de técnicas y relaciones estadísticas siempre contiene un componente aleatorio que no se conoce y no se puede eliminar.  Segundo, todos los métodos estadísticos utilizan, de una forma u otra, promedios móviles (o filtros estadísticos) que tienen un problema de falta de información al final de la muestra.  Esto hace que la estimación más incierta sea la de mayor interés, el último dato disponible.  Por último, todos los datos económicos están sujetos a revisión, en especial, los últimos datos disponibles.

¿Dónde nos encontramos actualmente en relación a nuestro potencial?  Después de varios años con una brecha negativa, todo parece indicar que ésta se va reduciendo y nos estamos acercando al potencial, pero todavía lejos del peligro de entrar al terreno de una brecha positiva.  El problema actual que nos enfrentamos es que si se materializa la desaceleración de Estados Unidos, nuestro crecimiento pudiera ser menor y de nuevo estaríamos con una brecha negativa creciente.

Fuente: http://jonathanheath.net

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